El Observatorio de Derechos de Niñas, Niños y Adolescentes (NNyA) de la Defensoría del Pueblo bonaerense se sumó a la campaña global para que gobernantes y dirigentes.

Observatorio de Niños y Niñas se suma a campaña para que vacuna contra el coronavirus sera universal.

El Observatorio de Derechos de Niñas, Niños y Adolescentes (NNyA) de la Defensoría del Pueblo bonaerense se sumó a la campaña global para que gobernantes y dirigentes adopten las medidas que garanticen el acceso universal y gratuito, con transferencia de tecnología, a la vacuna contra el coronavirus.

“A través de una convocatoria de Norberto Liwski (ex vicepresidente del Comité de Derechos del Niño de Naciones Unidas) hemos decidido sumarnos de forma activa a esta campaña porque coincidimos en que la próxima vacuna no debe tener una patente de comercialización”, explicó hoy Walter Martello, Defensor del Pueblo Adjunto de la provincia de Buenos Aires.

“Así se facilitará su elaboración, y su distribución universal y gratuita. Debe considerarse un bien social, un patrimonio de la humanidad”, añadió Martello, quien es además responsable del Observatorio de Derechos de NNyA.

La solicitud se da en momentos en que los tratamientos se encuentran en avanzado estado de aprobación científica.

Se trata de una iniciativa impulsada por Adolfo Pérez Esquivel, Premio Nobel de la Paz y referente del Servicio de Paz y Justicia (Serpaj); Norberto Liwski, exvicepresidente del Comité de Derechos del Niño de Naciones Unidas e integrante del Comité para la Defensa de la Salud, la Ética y los Derechos Humanos (Codesedh); y organizaciones sociales y civiles de trayectoria en la defensa de los derechos humanos.

Entre los antecedentes que avalan la solicitud se encuentra la vacuna de la Poliomielitis que después de la Segunda Guerra Mundial “tenía un alto poder de contagio, presentaba un índice elevado de mortalidad y quienes sobrevivían debían asumir severas discapacidades”.

“El 12 de abril de 1955 la humanidad recibió la mejor noticia de parte del doctor Jonas Salk cuando se dieron por concluidos los estudios preliminares, dando por aprobada y declarada efectiva y segura la vacuna contra la Poliomielitis. Fue el descubrimiento médico más grande de la historia”, indicó el comunicado difundido hoy por el organismo.

En ese punto, citó que años más tarde, el doctor Albert Sabin desarrolló una vacuna por vía oral que comenzó a utilizarse en 1957. El investigador de origen polaco, “renunció a sus derechos de patente con el fin de facilitar la difusión mundial de su descubrimiento lo antes posible”, subrayaron desde la Defensoría.