A 13 años de primer llamado, convocan a exconscriptos que aporten datos en juicios de lesa humanidad
El funcionario añadió que “en la convocatoria anterior pudimos dar con un número de entre 40 y 50 testigos que fueron de mucha ayuda en distintas causas, y en lo que va de la semana -la primera en la que se lanzó esta segunda convocatoria- ya recibimos tres llamados”.
No obstante, aclaró que “más allá de la cantidad en número, que es muy importante” lo que se buscan son “testimonios que nos permitan reconstruir como funcionaba el aparato represivo y como sucedieron los hechos”.
“Los que respondan al llamado deben saber que sus testimonios van a ser parte de procesos judiciales donde hay otras pruebas, otros testimonios y documentos que seguramente terminarán en una sentencia que permita explicar qué fue lo que pasó”, dijo Efrón.
“Por supuesto, habrá algunos testimonios que sean de mayor trascendencia que otros ya que no todos los excolimbas se vieron forzados a ver estos hechos. Por eso, estamos con mucha expectativa de contactar con todos, y con muchas ganas de empezar a trabajar con lo que nos puedan contar”, agregó.
Efrón se refirió además a la “gran colaboración” recibida como consecuencia de la anterior campaña, en el año 2010, y citó causas concretas en la que los testimonios fueron de importante utilidad.
Efrón dijo que la causa Vuelos de la muerte de Campo de Mayo, por ejemplo, se basó en declaraciones de exsoldados “para conocer el funcionamiento de vuelos clandestinos utilizados por el Ejército” lo que permitió “condenar en 2022 a cuatro jefes militares del Batallón de Aviación 601”.
“También fueron muy importantes las declaraciones en el juicio por los crímenes del grupo de tareas del Regimiento de Mercedes” cuyos testimonios “permitieron reconstruir un gigantesco operativo represivo en una casa que funcionaba como imprenta secreta del PRT-ERP en la localidad bonaerense de San Andrés, que permitió que tres exoficiales del Ejército fueran condenados por el secuestro y torturas a dos personas y por un homicidio”, reseñó.
Además, los excolimbas fueron importantes “para probar la planificación y la participación de diferentes destacamentos militares y policiales en la masacre de la quinta “La Pastoril”, en el que fueron secuestrados 8 militantes del PRT-ERP y otros 7 fueron asesinados”, enumeró el funcionario.
Por esto, Efrón aseguró que “desde la secretaría que conduce Horacio Pietragalla Corti, consideramos que es momento de relanzar esta convocatoria, que en su momento fue de mucha utilidad”.
“Ahora, lo estamos haciendo por segunda vez y les pedimos a todos los que hicieron el servicio militar en esos años que se comuniquen con nosotros para contarnos lo que vieron, para quiénes sirvieron, bajo quienes recibieron instrucción, en qué lugar estuvieron; y puedan así ser un gran aporte para el proceso de justicia en el juzgamiento de los crímenes de lesa humanidad”.
“Necesitamos reconstruir los hechos y determinar responsabilidades penales”, precisó, y para eso “necesitamos poder obtener más testimonios”.
Al mismo tiempo, sostuvo que es un trabajo “muy serio” el que se realiza y que desde la secretaría se guarda “la reserva de identidad en la medida en que la persona lo desee”.
“La idea es obtener aportes concretos para los juicios, obtener testimonios que serán utilizados en juicios orales donde están todas las partes representadas, con el debido proceso”, puntualizó.
En diálogo con esta agencia, Efrón agregó que la convocatoria forma parte de un trabajo donde “convocamos a testigos muy particulares” en el estudio de los crímenes de lesa humanidad, bajo la premisa de que “ya han sido de mucha utilidad” en los juicios que se tramitaron.
“Queda poco tiempo porque los imputados y victimas están falleciendo, si bien se ha avanzado más de 300 juicios y hay 1.100 personas condenadas sabemos que todavía hay muchas personas que permanecen impunes”, dijo.
En particular añadió que “todavía falta avanzar en este camino porque hay víctimas cuyos casos no llegaron a juicio oral, e imputados que no fueron sometidos a procesos”.
“Esta acción se enmarca en reconocer esta cuestión y en hacer algo, por eso pedimos que los que hicieron la colimba aporten lo que vieron, lo que escucharon, convencidos en que cualquier detalle puede ser de utilidad”, insistió.
La convocatoria está destinada a exconscriptos que hicieron el servicio militar obligatorio entre 1975 y 1983 y que pudieron ser testigos involuntarios de delitos cometidos durante la última dictadura cívico militar.
“Durante la última dictadura cívico-militar, miles de jóvenes que tuvieron que hacer el servicio militar obligatorio fueron testigos involuntarios de los delitos cometidos en dependencias militares y en operativos de las fuerzas represivas en todo el país”, enfatizó la Secretaría esta semana en un comunicado.
El organismo explicó que promueve esta iniciativa porque “ante el pacto de silencio de los miembros de las fuerzas armadas y de seguridad, su voz puede ser fundamental para obtener justicia por esos graves crímenes” y remarcó que en los últimos años esos testimonios “fueron fundamentales y permitieron condenar a responsables de crímenes de lesa humanidad”.
Para quienes tengan información, la Secretaría habilitó contactos por mail o por teléfono a fuicolimba@jus.gob.ar o al (011) 5300 4139.
Las denuncias que se reciban “tendrán el carácter de confidencial para garantizar la seguridad y la contención adecuada”, se indicó.
La iniciativa cuenta también con un espacio en el sitio institucional de la Secretaría, con entrevistas a tres excolimbas y los microrrelatos animados realizados a partir de declaraciones de exsoldados en los juicios.
La primera campaña impulsada por la Secretaría con el mismo objetivo fue realizada en 2010 bajo la consigna “El servicio militar ya no es obligatorio; el silencio, tampoco”, y permitió recopilar más de 40 testimonios, voluntarios y anónimos, que sumaron información y datos relevantes para avanzar sobre los juicios, consignó el organismo.