El Gobierno extendió el plazo para inscribirse en el registro de subsidios a la luz y el gas

El gobierno de Javier Milei anunció que extenderá hasta el 4 de septiembre el plazo para inscribirse en el Registro de Acceso a los Subsidios a la Energía (RASE), permitiendo así que los usuarios accedan a tarifas de luz y gas rebajadas. Manuel Adorni, vocero presidencial, lo comunicó en una conferencia desde Casa Rosada.

La Secretaría de Energía planea “depurar” el RASE mediante un exhaustivo cruce de datos, buscando reducir el gasto público. Casi dos millones de usuarios residenciales deberán reinscribirse, incluyendo 1,7 millones de hogares de bajos ingresos (N2) que fueron incorporados automáticamente y deben volver a registrarse individualmente.

Los hogares se clasifican en tres categorías según sus ingresos: Altos ingresos (N1), Ingresos bajos (N2) e Ingresos medios (N3). Según los últimos datos, hay 5,3 millones de hogares en N1, 8 millones en N2 y 2,7 millones en N3. Aquellos que no completen el trámite serán considerados N1 y perderán el subsidio.

En relación al gas, el Ente Nacional Regulador del Gas (Enargas) dispone de más información para su depuración, ya que la subvención se aplica a nivel nacional.

Las tarifas han aumentado hasta un 1.200%. En julio, las familias en el Área Metropolitana de Buenos Aires (AMBA) necesitaban más de 140 mil pesos para cubrir tarifas de servicios públicos, según un informe del Observatorio de Tarifas y Subsidios del IIEP. Se anticipa que el mayor impacto por la eliminación de subsidios y el aumento de tarifas se sentirá en agosto y septiembre.

El análisis de la UBA-Conicet estima que un hogar promedio del AMBA requiere 142.645 pesos para satisfacer sus necesidades energéticas, de transporte y de agua, lo que representa un aumento del 374% respecto a diciembre de 2023, cuando el costo era de 30.100 pesos. Este incremento se debe a las actualizaciones en tarifas de transporte, energía eléctrica, agua y gas natural a lo largo del año, y se ve afectado por la estacionalidad del consumo, donde temperaturas más bajas generan mayor demanda y costos más altos en las facturas.