Las Mujeres Radicales lanzan una fuerte advertencia: “No hay radicalismo posible sin feminismo democrático”

Santa Rosa, La Pampa, 23 de junio de 2025 – Con un encendido documento político, las Mujeres de la Unión Cívica Radical (UCR) cerraron su Encuentro Nacional realizado en Santa Rosa, La Pampa, con duras críticas al avance de la ultraderecha, el ajuste económico y la falta de paridad real dentro del propio partido. Denunciaron una ofensiva política y cultural que, a nivel global y nacional, amenaza los derechos de las mujeres, debilita las instituciones democráticas y promueve un modelo de exclusión social.

“En el mundo y en la Argentina, los derechos de las mujeres retroceden frente al avance de fuerzas políticas que transforman el odio en doctrina”, advierte el documento final del encuentro. Las radicales apuntaron contra la ultraderecha por reducir a las mujeres a roles subordinados y atacar las políticas de igualdad. También cuestionaron el uso de las redes sociales como plataformas para la violencia digital, el hostigamiento y la desinformación, que afectan de manera directa la participación política de mujeres y diversidades.

En el plano local, denunciaron que el gobierno nacional ha eliminado áreas de género, recortado políticas de cuidado y desmantelado programas clave para la igualdad. “El reciente índice de desocupación del 7,9% afecta particularmente a las mujeres jóvenes”, señalaron, y advirtieron sobre el impacto del ajuste en el sistema universitario —“uno de los espacios donde las mujeres han conquistado mayor autonomía”— y en el sistema previsional. “El 72% de quienes accedieron a la jubilación por moratoria son mujeres. Su eliminación es condenarlas a la pobreza”, expresaron.

Dentro del partido, exigieron una paridad efectiva y denunciaron que muchas veces la igualdad formal se vacía de contenido. “No alcanza con estar en las listas, hay que estar en las decisiones”, remarcaron. Reclamaron que la Secretaría de la Mujer sea incorporada a la mesa de conducción partidaria y que todos los comités asuman la igualdad de género como una bandera indeclinable del radicalismo democrático y popular. “La paridad debe ser una práctica viva, no una norma decorativa”, afirmaron.

El documento también lanza un fuerte cuestionamiento a sectores de la UCR que mantienen alianzas o actitudes complacientes con el gobierno nacional. “Nos preocupa la connivencia de sectores del radicalismo con un gobierno que degrada los derechos de las mujeres. Ser cómplices de este retroceso es profundamente antirradical”, señalaron. Y agregaron: “No hay lugar en el radicalismo para quienes naturalizan el ajuste brutal, la eliminación del Estado y el odio como programa”.

También hubo críticas al funcionamiento del Poder Judicial, al que acusaron de “elitista y clasista”, con fallos desiguales y falta de perspectiva de género. Respaldaron el fallo del caso Vialidad pero cuestionaron la inacción en causas como el Correo y el llamado “CryptoGate”.

Las mujeres radicales reafirmaron su compromiso con un feminismo profundamente democrático, igualitario y humanista, en sintonía con los valores históricos del partido. Rechazaron tanto el patriarcado disfrazado de progresismo como el oportunismo demagógico. “No hay feminismo sin justicia, y no hay radicalismo posible sin feminismo democrático”, concluyeron.

Desde La Pampa, el encuentro cerró con un llamado a la memoria, la participación activa y la defensa de los derechos humanos, reafirmando el legado de figuras históricas como Elvira Rawson, Florentina Gómez Miranda, Margarita Malharro y María Teresa Morchio. En un contexto de retroceso y polarización, las Mujeres Radicales ratificaron su decisión de no retroceder: “Es igualdad sin excusas. Es democracia sin hipocresía. Es el radicalismo que vale la pena”.