Dejó su vehículo en el taller y el chapista se fue de paseo durante Semana Santa: «la policía lo detuvo en estado de ebriedad»
Lo que comenzó como un simple encargo de reparación de un Chevrolet Prisma en un taller de chapa y pintura cerca de la Avenida Independencia y Chile, se convirtió en el inicio de una aventura que perturbó a una familia durante la Semana Santa.
El propietario, de 38 años, nunca imaginó que al dejar su coche en manos de confianza, este sería el protagonista de un paseo nocturno a cargo de un chapista irresponsable.
La situación alcanzó su punto álgido en la madrugada del lunes, alrededor de las 4 de la mañana, cuando las autoridades detuvieron al chapista de 30 años conduciendo el vehículo a alta velocidad y de forma errática por la Avenida Gaucho Méndez, cerca de la rotonda de ingreso al Barrio Los Lapachos.
El chapista, claramente ebrio y sin documentación que justificara su uso del coche, estaba lejos de estar realizando una tarea relacionada con el vehículo.
La rápida intervención de la Policía de Seguridad Vial y de Tránsito Municipal puso fin a la escapada del chapista, informando al propietario sobre lo sucedido.
El dueño del taller había encargado a su empleado mover el auto a un lugar seguro como parte de los procedimientos estándar, pero el chapista decidió usar el vehículo para su propio disfrute.
El incidente, calificado como hurto, resultó en la detención del acusado, quien ahora se encuentra en libertad.